Anoche mire la pelicula de Titanic (creo que ya la vi mas de veinte veces)y como siempre llore.
No solo por la trama de la pelicula...si no por los recuerdos que me trae.
Hace casi veinte años fuimos a verla al cine con mi hermana y con mi cuñada Gra,a quien recién conocía.
Fue en un cine en capital.
Lloré,me sentí decepcionada de que Jack muriera,me parecia el peor final para una historia de amor.
Mi mamá estaba viva en esa epoca.Y yo la sentía eterna a mi lado.
Sin embargo la perdí...
Y después de mucho sufrimiento y dolor y angustia y tristeza y desesperanza...recién pude entender esta pelicula...es decir aceptar ese final tan triste.
Porque lo que la pelicula intentaba enseñar...es que aun cuando uno pierda el mas grande amor...eso no significa que la vida se termina...no significa que debamos bajar los brazos y sentir que todo esta perdido.
Porque Jack le hace prometer a Rose que pase lo que pase nunca iba a rendirse-"moriras cuando seas viejita en tu cama...no aquí...no ahora"-
Siempre me parece que es mamá quien me dice esas palabras.Ahí en medio de mi depresión.
Puedo escucharla pidiendome que no me rinda.
Me recuerdo parada frente a su tumba prometiendole que jamas iba a rendirme.
Y es de esas promesas que no se pueden romper.
Uno sabe que sobrevive por algo...y mientras trata de averiguar para que sabe en su corazón que ese ser querido que perdio necesita saber que jamas nos rendiremos.
Me gusta esta pelicula por ese significado para mi.
Cuano veo a Rose viejita y llena de fotos de todas las cosas que se atrevió a hacer en la vida...me imagino que algún día estaré igual :rodeada de cientos de miles de fotos de lugares y cosas que viví...
Y sé que mamá estaría orgullosa de ver que no me rendí...que seguí adelante con mi vida.
Todos estos años sin mamá fueron de mucho aprendizaje y de felicidad.
He vivido tanto-aún cuando ni yo lo creía posible-
Porque como dice la canción de la pelicula "Mi corazón seguira adelante"
Veinte años de esta maravillosa pelicula...
Mas de diez años sin mamá...
Y mi corazón sigue adelante.
Es una promesa inquebrantable.
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