Desde que conozco el Jardin Japones , los arboles de cerezo me parecen hermosos.
Sobre todo porque el color rosa es mi favorito.
Así que cuando pensé que árbol podía pintar, me pareció que uno de cerezos seria perfecto.
Decidi pintar un arbol , porque en esta casa no hay ninguno.
Y ya me había acostumbrado , en la cas anterior, a pasar las tardes entre arboles.
La verdad los extraño mucho.
Su sombra, el ruido del viento entre sus hojas, los pájaros cantando en sus ramas.
Eran como un refugio donde quedarse y sentir la brisa de la tarde , y contemplar mis plantas creciendo y floreciendo.
Ojala algún día vuelva a tener arboles reales para amar estar bajo su sombra.
Mientras tanto me refugio en este árbol pintado con flores rosas y con mucho amor.
https://www.youtube.com/watch?v=8W_5VXm-nf8